Los perros no comprenden, como las personas, las diferencias entre tiempo de vacaciones y tiempo de rutina y obligaciones. No asimilan ni entienden por qué, de repente, desaparece el ocio de las vacaciones, los largos paseos y el tiempo extra que comparten con sus propietarios. El retorno a la rutina después de unas vacaciones puede resultar también muy duro para los animales de compañía, lo que puede conllevar, como ocurre con algunas personas, una depresión postvacacional.
En situaciones normales, en pocos días o semanas, el perro se adapta a la nueva situación y horarios, aunque hay casos en que esto se complica, debido a algún tipo de problema psicológico o físico. Si el perro presenta cambios en el comportamiento, tales como la pérdida del apetito, conductas destructivas o movimientos repetitivos, hay que acudir lo antes posible al veterinario para obtener un diagnóstico que determine un tratamiento lo más adecuado posible.
El control de esfínteres de las mascotas también se puede ver afectado tras el relajamiento de las vacaciones. Si no se trata de un problema físico, como diarrea o ansiedad psicológica, en unos días la situación se normaliza. Por ello, hay que tener paciencia para conseguir que el perro se readapte a los nuevos horarios, así como para corregir rutinas adquiridas durante las vacaciones y que ya no sirven para la nueva situación postvacacional.
Estas serían las principales recomendaciones a tener en cuenta para el regreso de las vacaciones con mascotas:
- Volver gradualmente a las rutinas. En general, el retorno a la rutina de las mascotas se debe hacer de manera gradual, pero con firmeza, teniendo en cuenta los buenos hábitos.
- Control de la alimentación. Hay que vigilar la manera de alimentar nuestras mascotas, volver establecer las horas más adecuadas y en las cantidades acostumbradas.
- Dar importancia a la higiene. La higiene y limpieza es uno de los factores que más influye en el comportamiento de los animales de compañía: baño, corte de uñas y cepillado de los dientes son tareas fundamentales para una buena salud.
- Lavar los juguetes y accesorios. Hay que lavar o cambiar los juguetes, las camas, la ropa y cualquier otro elemento que la mascota haya utilizado durante las vacaciones fuera de casa.
- Volver a la actividad física habitual. Ya sea perros o gatos, los horarios establecidos para las diferentes actividades diarias deben ser una prioridad para evitar el estrés o la depresión.
- Observar atentamente el estado de ánimo. Lo que para las personas supone una vuelta a la rutina, para las mascotas supone volver a pasar más horas solos en casa. La ansiedad por separación es un problema que se puede tratar con buenos resultados en la mayoría de los casos.
- Mantener la alerta ante posibles enfermedades. Como ya os he comentado más de una vez, cada zona de España tiene sus enfermedades endémicas (Ej. En Levante abunda mucho más la Leishmaniosis que en Madrid o Galicia)
Como veis coincidimos en muchos de los 7 puntos ( por no decir todos)
Un fuerte abrazo y feliz reincorporación a la dura realidad
Carlos Quintana